Todos los textos de esta entrega pertenecen a
Mercedes Franco, escritora venezolana de prestigio internacional, ganadora del Concurso Nacional de Cuentos y
Relatos: Misterios y Fantasmas Clásicos de la Llanura "Ramón Villegas
Izquiel", organizado por la UNELLEZ-San Carlos, en 1999.
Gracias por su visita
Isaías Medina López Coordinador.
MARÍA LIONZA
Diosa de la montaña de Sorte, en Yaracuy. Es
conocida también como “la Reina”, y tiene su morada en la mágica montaña de
Sorte, en el estado Yaracuy. Hay muchas versiones de su origen, pero la que más
nos gusta la supone caquetía, hija de un cacique. Nació con ojos claros, lo que
se consideraba mal presagio, y el padre, para evitar su muerte, la escondió en
una cueva de la montaña. Todos los días iba a visitarla.
Un día, vio que una hermosa danta de poco
tiempo estaba junto a la niña. Parecían entenderse muy bien, jugaban y comían
juntas. La danta le traía frutos silvestres y la llevaba en su lomo.
Con el correr del tiempo, la muchacha
bautizada con el nombre de María, siguió viviendo en el bosque donde era
visitaba por muchos, porque conocía la ciencia de curar con plantas. El nombre
de María Lionza según algunos se debe a que andaba con una “onza” o puma. Según
otros proviene de que María pedía como pago, por sanar a los enfermos, una onza
de oro.
María curaba también a los animales con
hierbas y flores del monte. La gente le atribuía extraños poderes. A su muerte,
muchos creían verla por la montaña, cabalgando sobre su danta. Se convirtió por
el fervor popular en una deidad protectora y su culto crece cada día más. Hoy
en día tiene su reino en Sorte, una montaña de Yaracuy y junto a ese rio, cuyas
aguas se consideran curativas, tiene su corte, donde figura el Negro Primero y
el indio Guaicaipuro, sus espíritus acompañantes. Los tres forman lo que se
conoce como “Las Tres Potencias”. Muchas personas van hasta allá para ser
orientadas y sanadas por los numerosos “brujos” y curanderos del lugar devotos
de María Lionza.
EL CAZADOR
Fantasma muy conocido en las montañas de
Lara. Se oyen sus voces de mando, azuzando a sus perros de caza y el ladrido de
los animales.
Refiere la leyenda que se trata del espíritu
de un hacendado de la región que se extravió en una montaña, y por no conseguir
la presa que buscaba, blasfemó, maldijo a Dios y fue castigado. Dicen que murió
picado por una cascabel, y que su espíritu errante sigue vagando por los
montes, tratando de conseguir buena caza. En España existe una leyenda muy
similar, en la cual el cazador era un sacerdote, quien al ver pasar una liebre,
interrumpió la misa que oficiaba y salió tras ella, con sus perros. Por esto
fue castigado y vaga eternamente tras aquella liebre misteriosa, que se supone
demoníaca.
LA
SAYONA
Es una mujer hermosa, de cuerpo escultural y
larga cabellera. Le dicen la Sayona por su túnica o saya larga. Esta mujer
viene asustando a los trasnochadores desde el siglo diecinueve. Se acercaba a
los borrachitos y serenateros, si se encontraban solos. Cuando miraban su
hermoso cuerpo comenzaban a cortejarla. Ella entonces sonreía, mostrando unos
colmillos largos y puntiagudos. Dicen que durante la Colonia, algunas mujeres
se "disfrazaban" de La Sayona, para poder encontrarse a escondidas
con sus enamorados, sin despertar comentarios y chismes.
SIETE
PIEDRAS
En el estado Monagas las muchachas recogen
siete piedras pequeñas la noche del sábado, antes del Domingo de Ramos. Las
pasan por su rostro, pidiendo ayuda y protección a Dios para alejar el mal.
Luego las colocan bajo su almohada y deben dormir con ellas allí. Al amanecer
se tiran lejos. Con ellas se irá la mala suerte y todas las malas influencias.
EL
SILBÓN
El Silbón es un personaje muy popular en los
Llanos de Portuguesa. Se dice que era un muchacho indómito, hostil y de mal
proceder, que en arrebato de ira se enfrentó a su padre y lo mató. Por eso fue
condenado a vagar por siempre, con los huesos de su padre en un saco. Sus
tétricos silbidos se escuchan en la sabana. Si se oyen cerca es porque está muy
lejos. Pero si escuchan lejos hay que prepararse para correr.
SIRENA
Ser mitológico de la antigüedad, mujer con
cola de pescado. Algunos han creído verlas en las playas venezolanas y los
ancianos margariteños aseguran que existen y que cuando se dejan ver de los
humanos les traen mala suerte.
SORTE
Montaña de Yaracuy donde tiene su morada
María Lionza, la reina de los bosques y de los animales. Las aguas del río al
pie de la montaña se dice que tiene propiedades curativas. Sorte es un reino
mágico, donde habitaban grandes mariposas azules que indican al devoto la ruta
a seguir para acercarse a la diosa. Es una especie de centro místico y
espiritual, donde se está en pleno contacto con las fuerzas de la naturaleza y
con lo maravilloso.
FANTASMA
DE SUCRE
En la Plaza Sucre de Cumaná muchos han creído
divisar a lo lejos la sombra doliente del Gran Mariscal. Es fácil reconocerlo
por su largo capote negro, sus brazos cruzados y la tristeza con que se pasea,
custodiando la ciudad que lo vio nacer, a la que jamás pudo volver.
EL
SALVAJE
Es un ser misterioso, mitad hombre, mitad
animal. Tiene aspecto de gorila grande, o de oso. Según una vieja creencia se
roba a las muchachas y se las lleva a vivir con él, a su casa, en lo más alto
de los árboles. Y con su lengua áspera y corrosiva, les lame la planta del pie
para que no puedan escapar. Pareciera estar emparentado con el Pie Grande de
Norteamérica y con el Yeti del Himalaya, ambas criaturas monstruosas, a medio
camino entre el mono y el hombre, que habitan los bosques y montañas.
Aquí en Venezuela lo han visto en el
occidente, cerca de Los Andes. Pero muchas etnias indígenas, como los baré,
aseguran haber visto también al Salvaje en lo más profundo de la selva
amazónica. Incluso afirman que hay dos: El Salvaje Grande, de casi dos metros
es tímido, y uno más pequeño, de poca estatura, de naturaleza malévola.
SANTERÍA
Aunque cada vez está más difundida entre los
venezolanos, para muchos la santería sigue siendo un gran misterio. Se trata de
una religión afrocaribeña cuyas raíces se encuentran en la cultura del pueblo
yoruba de África occidental, y que cuenta con muchos practicantes en Estados
Unidos. La santería surgió en el siglo XIX entre los miembros de la comunidad
yoruba que, pese a ser enviados a Cuba como esclavos, se mantuvieron fieles a
sus creencias y tradiciones ancestrales. La palabra española "
santos" se aplicó a los orichas (espíritus) yoruba, y fue este uso el que
dio origen al término cubano empleado para referirse a la religión yoruba:
santería (camino de los santos). Es básicamente una religión africana, pero
refleja la influencia de la tradición católica.
Aunque este credo reconoce a un dios supremo,
denominado Olodumare, la interacción humana con el plano divino se centra
generalmente en los numerosos orichas. El creyente suele desarrollar una
relación especial con una orichá, que puede poseer el cuerpo de aquel durante
el culto. Las ceremonias religiosas suelen ser prolongadas y elaboradas; las
más importantes incluyen un banquete en el que participan orichas y creyentes.
SAPAROS
Extraños personajes fluviales, mitad humano y
mitad peces. Son un pueblo numeroso, con un gran corte, donde impera el Rey
Saparo y la Reina Sapara. Hay princesa, duques y pajes y hasta carruajes,
tirados por diligentes camarones de río. Los saparos viajan grandes distancias
y en ocasiones han sido vistos por algunos navegantes de nuestros grandes ríos.
SIETE
PIEDRAS
En el estado Monagas las muchachas recogen
siete piedras pequeñas la noche del sábado, antes del Domingo de Ramos. Las
pasan por su rostro, pidiendo ayuda y protección a Dios para alejar el mal.
Luego las colocan bajo su almohada y deben dormir con ellas allí. Al amanecer
se tiran lejos. Con ellas se irá la mala suerte y todas las malas influencias.
REGALOS
En nuestro país se considera de mala suerte
regalar flores a niños, pues se supone que las flores se regalan a los muertos.
Regalar pañuelos es considerado pavoso, porque es una implícita invitación a
llorar, no se deben regalar cuchillos ni navajas, porque se " corta"
la amistad. Y al regalar flores hay que pensar que si se quiere demostrar amor
las rosas rojas son lo mejor. Las amarillas denotan traición y, las blancas,
duelo.
REZADORES
DE CULEBRAS
En el Oriente de Venezuela se habla de los
" rezadores de culebras". Son personas dotadas de un poder especial
sobre estos reptiles. La fuerza de los
rezadores es tal que puede hacer salir a las culebras de sus
escondrijos, ahuyentarlas o matarlas. Una niña de la región había oído decir
que su abuelo era un excelente rezador de culebras, muy solicitado en la
región. Ella, íntimamente, no creía en esas cosas. Un día iba con su abuelo de
un pueblo a otro y por el camino se encontraron con un cascabel. El animal se
preparó para atacar y la niña se quedó inmóvil. Entonces observo a su abuelo.
Los labios del anciano apenas se movían, musitando sus rezos mientras su mano
derecha trazaba cruces en el aire. Lo que pasó a continuación fue asombroso: la
víbora se estiró, recta como si fuese una línea trazada en polvo. Luego hubo un
crujido, como si algo en ella se quebrara por dentro. Y allí se quedó la
culebra, inmóvil para siempre, detenida en el tiempo, mientras la niña y su
abuelo proseguían su camino.
REZANDEROS
DE GUSANOS
En el estado Táchira hay personas que "
rezan" los gusanos, es decir, conocen oraciones para exterminarlos. Esto
es particularmente en el caso de los animales de corral, cuyas heridas a veces
se infectan. Los rezanderos de gusanos los curan y sacan cualquier larva o
gusano que puedan tener.
ROCA
VIVA
En las últimas estribaciones de Los Andes,
hacia el piedemonte barinés, existe una montaña misteriosa. Los naturales la
conocen como "Roca Viva", porque desde tiempos inmemoriales parece
moverse lentamente. Además, a veces se escuchan extraños ruidos que provienen
de su interior. Al pie de esta escarpada montaña conocida como " Roca
Viva" hay rocas pintadas con hermosos petroglifos.
Se dice que un guía de la región subió hasta
la cumbre y después de un difícil acceso, logró llegar a un lugar abierto. Allí
vio escalinatas de piedra y enigmáticas estatuas. Todo parecía formar parte de
los restos de una antigüedad ciudad india. Fascinados por el relato del guía
que escalo la " Roca Viva", muchos exploradores intentaron encontrar
la mítica ciudad. Ante la promesa de un fabuloso descubrimiento, investigadores
y arqueólogos armaron también sus expediciones. Sin embargo, nadie encontró
ningún vestigio y la leyenda de la ciudad pérdida cayo en el olvido.
Muchos campesinos, sin embargo, afirman haber
visto las ruinas. Aseguran que la ciudad perdida en la montaña está allí,
invisible para los extraños. Y la " Roca Viva" continua moviéndose,
produciendo asombrosos ruidos, en misterioso coloquio con la tierra andina,
llenan de sorprendentes tradiciones.
QUEBRADA
DE LAS ÁNIMAS
Entre El Tocuyo y El Molino, dos pueblos del
estado Lara, se encuentra “La Quebrada de las Animas". En este pequeño
arroyito se bañan a veces los niños campesinos, pero solo durante el día.
Porque según una antigua leyenda del lugar, al anochecer se ven allí blancas
apariciones, extrañas sombras fugitivas.
Afirma una creencia popular que en este
arroyo larense ocurrió un hecho terrible. Un capitán español había abandonado a
su mujer con un niño pequeño, por una bella cortesana recién llegada. Se dedicó
a su nuevo amor, sin pensar que pronto pagaría las consecuencias de su
villanía, pues la dama en cuestión aceptaba el amor de otros hombres.
Alguien le advirtió al capitán que estaba
siendo víctima de una engañifa. No tuvo más que seguir a su nuevo amor hasta el
arroyo. Ciego de ira, el hombre mató a la infiel y a su amante. Estuvo solo
unos días preso, pues en la época, el hecho tenía grandes atenuantes. El
capitán fue al mismo río y allí se dejó morir de hambre: Dicen que desde lejos se
le veía vagar llorando por el lugar. Con el tiempo el río se hizo mínimo. Y en
las noches más oscuras, se ven allí tres sombras dolientes, entre las aguas de
la "Quebrada de las Ánimas".
No hay comentarios:
Publicar un comentario